La estrella está ahí y brilla.
Está ahí, sólo que es pequeño. Porque aún te queda mucho camino por recorrer. Está lejos porque de tu magnanimidad se espera un viaje interminable. Pero: ¡la estrella está ahí!
Hoy, en el tercer domingo de Adviento, un domingo de contemplación y luz creciente, el padre Joseph le invita a detenerse un momento y respirar hondo conscientemente. El Adviento es una época especial del año eclesiástico, un tiempo de expectación, esperanza y reflexión interior. Paso a paso, nos conduce hacia la Navidad, cuando podemos celebrar la llegada de Cristo.