La Abadía de Admont comenzó a constituir su colección de arte contemporáneo en 1997. Hasta el día de hoy, se han añadido a esta colección obras procedentes de compras de galerías, de colecciones, directamente de artistas y también en parte gracias a donaciones y dotaciones. Al cabo de poco tiempo, los buenos y permanentes contactos, principalmente con artistas austriacos, han dado lugar a una nueva situación.